¿Alguna vez has pensado en toda esa gente con la que, obligado por tu entorno, debes relacionarte? No me refiero sólo a los amigos que siempre han estado ahí, sino a las personas que conoces de forma parcial únicamente por tu trabajo, el gimnasio al que vas o los locales que frecuentas. Quizás sólo sean una pequeña parte de tu vida, pero están ahí, son como tú, posiblemente tengan hasta las mismas preocupaciones y los mismos deseos.
Sin embargo, eso nunca lo sabrás. Nunca sabrás realmente como es esa persona que ves todos los días si te limitas a lo estrictamente profesional. En mi opinión, y si alguna vez existió, el contacto humano se ha perdido. Y puede que de forma irremediable. ¿Quién está dispuesto a perder parte de su tiempo a hablar con alguien que sólo conoce de vista? Es más fácil tener una imagen estereotipada, subjetiva y superficial. Y esto contrasta con otro tema: la gente no está dispuesta a perder su tiempo conociendo a los demás, pero sí lo pierde hablando de temas tan banales como el último partido de su equipo favorito, el nuevo disco del grupo de moda o incluso su última adquisición.
Volviendo al tema, en mi rutina debo cruzarme con mucha gente, como casi cualquiera, y seguramente termine cruzándome con mucha más gente. Tantas oportunidades de conocer una gran persona, una gran historia, o, al menos, una forma de pensar diferente y yo sigo inerte. Un día será demasiado tarde. Un día simplemente todas esas persona que forman la parte "accesoria" de mi vida desaparecerán, de hecho ya lo están haciendo, y con ellas todas mis estereotipadas, subjetivas y superficiales impresiones.
Entonces pensaré en qué he hecho en todo ese tiempo, en porqué soy tan hipócrita y no hago nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario